Durante la última década, la tasa de transferencia anual del Puerto de Iquique se ha duplicado, alcanzando niveles que a la fecha catapultan a este terminal como el puerto comercial más importante del norte de Chile. Esto se explica, principalmente, por el ingreso de un concesionario privado.

En 1998, la ley de modernización del sector portuario estatal, incluyó dentro de las nuevas potestades de las recién creadas empresas portuarias autónomas, la facultad de licitar áreas para la explotación de sus frentes de atraque.

Esto permitió que Empresa Portuaria Iquique, en el año 2000, llevara a cabo un proceso internacional de licitación que adjudico el frente nº2 denominado “Espigón” a Iquique Terminal Internacional (ITI), una empresa que en primera instancia consideraba capitales del grupo de Sudamericana Agencias Aéreas y Marítimas, SAAM -por un 60%- y 40% Dragados de España, pero que posteriormente fueron vendidas hasta llegar al cuadro actual, en el que SAAM es dueño del 85% y el otro 15%  es de Empresas Navieras, AGUNSA.

A diferencia de otras licitaciones de similares características realizadas por empresas portuarias, en el caso de Iquique, el pago inicial o “at front” que debía realizar la empresa concesionaria para ingresar al negocio se incorporó a las mejoras e inversiones que ésta debía realizar de acuerdo al contrato.

Por esta razón, las inversiones realizadas por el concesionario –que a la fecha superan los us$40 millones- incluyeron la adquisición de grúas de alto tonelaje, equipo de patio y la construcción de un muelle Post Panamax corto de 331 metros de largo y 12,5 metros de calado.

Dado este exitoso resultado, en 2010 y mediante el compromiso de nuevas inversiones, la concesión se extendió otros 10 años, permitiendo que en la actualidad el puerto cuente con la infraestructura y tecnología necesarias para que a Iquique arriben las naves más grandes llegadas a nuestro país.

Macro región andina

Las inversiones en el puerto de Iquique se justifican por su sostenido  crecimiento, el que se ha visto impulsado fuertemente por dos factores:

El primero, es que el puerto de Iquique se encuentra inserto en una plataforma logística excepcional, que incluye a la Zona Franca de Iquique, la más grande del continente y los más grandes proyectos mineros del país. Por otro lado, el avance y fortalecimiento de las relaciones con las principales zonas productivas del continente como Bolivia, Paraguay, el norte de Argentina y el oeste de Brasil -las que forman parte de la denominada macroregión andina-, un mercado que suma más de 20 millones de habitantes y que se especializa en la comercialización de productos como cuero, granos, soya, minerales, etc.

Hoy en día, la comunicación vial con la macroregión andina, se ve incrementada por la construcción de un corredor bioceánico -de aproximadamente 4000 kilómetros- que conectará Iquique con Santos, en Brasil, ofreciendo así una salida marítima al “corazón” productivo del continente.

Nuevo proceso de licitación

Desde el inicio de la concesión, el Puerto de Iquique ha experimentado un significativo aumento de la cantidad de carga transferida, pasando desde 1.333.277 toneladas durante el 2000, a 2.706.537 durante el 2011, lo que se traduce en un aumento del 103%.

También se destaca el aumento en la carga contenedorizada, cuyo crecimiento alcanzó el 128% en el mismo lapso de tiempo, pasando de 107.545 TEUs en 2000 a 245.329 en 2011, tipo de carga que representa el 80% del total de carga transferida, reflejando así el efecto de especialización que ha tenido la concesión del terminal 2 del puerto de Iquique.

Transcurridos trece años de la concesión, los resultados saltan a la vista y comprobaron, en el tiempo, que la modernización del sector portuario estatal a principios  de esta década eran sumamente necesarios.

Este escenario ha motivado la realización de proyecciones y análisis de las ventajas y debilidades ya no tan solo del mercado, si no también de la infraestructura requerida para poder afianzar este crecimiento.

Por una parte, Iquique cuenta con un muelle o terminal privado altamente competitivo a nivel nacional e internacional, operado por un privado bajo la modalidad “monooperador” y un terminal publico operado bajo la modalidad “multioperador”, el cual con los años ha perdido competitividad frente a su vecino, esto porque mientras en el terminal privado se realizaron las inversiones necesarias para cumplir con las exigencias del mercado, el frente publico, ante la imposibilidad de recibir inversiones estatales -de acuerdo a la Ley que regula el sector-, ha perdido competitividad y se ha visto imposibilitado de recibir naves de mayor calado.

Es por esto que en 2012, Empresa Portuaria Iquique inició el proceso de licitación del Terminal 1 “Molo” y sus respectivas áreas de respaldo, concesión que será por 30 años y que contempla como obras de inversión, la ampliación del terminal o la construcción de un tercer frente de atraque, lo que permitirá recibir a la nueva generación de naves “New Panamax”, con capacidad para transportar hasta 12.000 contenedores.

Con esto se espera generar las condiciones de competencia necesarias para enfrentar el nuevo escenario de la industria mundial y dar respuesta a la demanda proyectada para los próximos años en el puerto de Iquique, que sitúa su tasa de transferencia en 5,7 millones de toneladas al año, más del doble de lo que se transfiere en la actualidad.

Hoy, las bases de este proceso se encuentran en etapa de revisión por parte del Tribunal de Defensa de la Libre Competencia. Una vez pronunciada la entidad, se realizarán los ajustes necesarios y serán publicadas gratuitamente.

Años Carga Transferida TEUS

2012

2.448.343

245.329

2009

2.236.280

207.940

2006

2.288.333

226.197

2004

1.884.064

158.957

2002

1.552.577

111.510

2000

1.333.277

107.545

 Infografía: Evolución carga puerto de Iquique

Publicado en diario Pulso 18 febrero 2013

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