Columna de Magdalena Balcells González, Presidenta del Directorio Empresa Portuaria Iquique
El Puerto de Iquique marcó un hito clave en su proceso de modernización al incorporar una grúa móvil al Terminal Molo. Este hecho, que responde a una alianza público-privada con el operador CEC Chile, no solo representa una mejora concreta en nuestras capacidades operativas, sino también el cumplimiento de un compromiso asumido por Empresa Portuaria Iquique en el marco del Corredor Bioceánico Vial.
Así, la grúa Liebherr LHM 550, con una capacidad de levante de 154 toneladas y una inversión cercana a los USD 7 millones, refuerza la competitividad del terminal multioperado y amplía las posibilidades del puerto para atender carga general, de proyecto, factoría y sobredimensionada. Es una demostración de confianza de inversionistas privados en la visión de desarrollo que hemos trazado para el Puerto de Iquique.
Este avance nos prepara para el futuro. El Corredor Bioceánico no es una aspiración lejana, sino una ruta en construcción, donde la articulación con países vecinos y la infraestructura logística juegan un papel decisivo, en un contexto de integración regional que da sentido a cada uno de los pasos que damos desde el norte de Chile.
Nuestro rol en esta cadena de valor no solo se define por nuestra ubicación estratégica, sino por la capacidad de responder, con hechos concretos, a los requerimientos que impone una economía global cada vez más interconectada. La incorporación de esta grúa, que permitirá mejorar los tiempos de transferencia y diversificar los servicios portuarios, es una clara muestra de ello.
Desde EPI, seguimos comprometidos con un modelo de desarrollo basado en la colaboración, la sostenibilidad y la visión de largo plazo. Esta inversión es también un ejemplo del valor que puede generar el trabajo conjunto entre el sector público y privado.
Hoy, el Puerto de Iquique ofrece una propuesta abierta, moderna y sostenible. La llegada de este nuevo equipamiento se traduce también en más empleabilidad, más capacitación en tecnologías de alto estándar y más oportunidades para trabajadores y trabajadoras del sector portuario. Además, nos posiciona como un actor confiable para el comercio internacional y para los países que ven en Iquique una salida efectiva hacia el Pacífico.
Esta grúa no es solo una herramienta operativa: es una señal concreta de que el Corredor Bioceánico avanza, y el Puerto de Iquique avanza en la materialización del desafío.