Columna de Magdalena Balcells González, Presidenta del Directorio de Empresa Portuaria Iquique
El Puerto de Iquique se encuentra en la antesala de uno de los procesos más estratégicos de su historia reciente: la licitación de la nueva concesión portuaria, cuyo inicio de operaciones está previsto para el 1 de julio de 2030.
Conscientes de la magnitud de este desafío, hemos iniciado un proceso de sociabilización con autoridades regionales y comunales, buscando que el diseño del modelo de concesión sea compartido y entendido como una oportunidad estratégica. En este contexto, el tema fue abordado en la reciente sesión del Consejo de Coordinación Ciudad Puerto.
El desafío es claro: proyectar a Iquique como un puerto moderno, eficiente, sostenible y competitivo. El modelo de concesión deberá ser lo suficientemente atractivo para convocar a oferentes con experiencia y capacidad, pero al mismo tiempo establecer exigencias y estándares que garanticen inversiones en infraestructura y equipamiento de la magnitud necesaria para materializar el puerto que estamos proyectando. Solo así aseguraremos mejoras sustanciales en la performance actual y responder a las necesidades del comercio marítimo de los próximos 30 años.
Este proceso no es solo un cambio de operador. Es la puerta de entrada a una etapa de crecimiento y desarrollo que potenciará la competitividad regional y abrirá nuevas oportunidades de empleo. La licitación será sometida a la aprobación del Ministerio de Transportes y Telecomunicaciones, en plena concordancia con las políticas públicas nacionales y con la mirada de desarrollo de Tarapacá.
En esta línea, en la reciente reunión del Consejo Ciudad Puerto reafirmamos un compromiso compartido. Tanto los alcaldes de Iquique y Alto Hospicio, como el gobernador regional, destacaron la relevancia del diálogo y la gobernanza descentralizada para avanzar en este camino. Asimismo, la Seremi de Obras Públicas dará a conocer iniciativas que contribuirán a mejorar la accesibilidad y conectividad del puerto, factores claves para el éxito de la futura concesión.
Desde Empresa Portuaria Iquique sabemos que el puerto no se construye solo con muelles y grúas, sino también con acuerdos, planificación y confianza. Este proceso de licitación será el punto de partida de un puerto a la altura de los desafíos del comercio global y de las oportunidades que el corredor bioceánico, la minería regional, la eventual apertura del cabotaje y el comercio transfronterizo traerán consigo. Nuestro compromiso es avanzar de la mano con la comunidad y las autoridades para que Tarapacá aproveche al máximo esta oportunidad histórica.
