Columna de Magdalena Balcells González, presidenta de Directorio Empresa Portuaria Iquique
Con la reciente aprobación de la ley que modifica las restricciones al cabotaje marítimo en Chile, el país da un paso histórico que potenciará la competitividad logística y abrirá nuevas oportunidades para el desarrollo de nuestra industria marítima y portuaria. Estamos convencidos que, al igual que en el comercio internacional, esta ley potenciará las conexiones internas de Chile para que sean ágiles, sostenibles y competitivas.
Hasta hoy, enfrentábamos una limitación que obligaba a desviar cargas hacia otros puertos, encareciendo costos y prolongando tiempos de tránsito de manera innecesaria. Sin ley de cabotaje, los puertos de Chile han estado en una de posición de desventaja en comparación con otras rutas logísticas globales. Es por eso que esta modificación legal, es un cambio trascendental que nos permite optimizar los flujos de carga y contenedores dentro de nuestro territorio, haciendo uso eficiente de nuestras rutas marítimas y reduciendo considerablemente los sobrecostos.
Iquique, que históricamente ha sido un puerto estratégico en el norte de Chile, tiene la oportunidad de reafirmar su rol logístico, conectando al país de manera más eficiente. Este avance abre la puerta a nuevas rutas y modelos logísticos que permitirán reducir tiempos de tránsito y minimizar la huella ambiental del transporte. Al migrar parte del transporte terrestre de larga distancia al modo marítimo, no solo se optimizan los costos, sino que se descongestionan las carreteras, reduciendo el impacto ambiental y mejorando la sostenibilidad en su conjunto.
Pero este cambio no se limita solo a la eficiencia operacional. También representa una oportunidad para fortalecer nuestra Marina Mercante Nacional. La ley incentiva la creación de empresas navieras chilenas y promueve la contratación de tripulantes nacionales, lo cual es fundamental para el desarrollo económico y laboral de nuestra región. En un país tan largo y diverso como Chile, el mar siempre ha sido una vía natural de conexión. Esta nueva normativa hace que esa conexión sea más viable, competitiva y moderna.
Este cambio legal es solo el comienzo de un proceso que, de implementarse con visión y rapidez, tendrá efectos profundos en la competitividad de la economía nacional y en la forma en que Chile se conecta con el mundo.
Ahora es el momento para actuar y para posicionar nuestro Puerto de Iquique como un actor clave en el desarrollo logístico de la región y el país. La apertura del cabotaje no es solo una mejora operativa, es una reinvención de cómo entendemos la conectividad marítima.


